Por su estilo barroco que roza con lo fantástico e inusual, se considera uno de los escritores más destacados de habla hispana, el primer intelectual latinoamericano en obtener el Premio Miguel de Cervantes otorgado en 1977.
De Carpentier se reconocen sus obras, “El siglo de las Luces”, “El recurso del método”, “El arpa y la sombra” y “La consagración de la primavera”, esta última recoge el paso del autor por San José de las Lajas y su descanso en una Ceiba, la cual hoy es sitio esencial para una de las tradiciones lajeras: La Ceiba de Don Alejo.
El estilo de Alejo Carpentier sobrepasa las dimensiones de la escritura. Gran renovador de la narrativa en su tiempo. En sus obras se advierte su vasta cultura e imaginación. Sus personajes están permeados de mitos, leyendas y sueños para significar el realismo mágico que distingue a nuestra América.
En Carpentier concurren las dotes de un excelente escritor con las del descubridor del continente en que vivimos. El sincretismo religioso y el voduismo nos permiten comprender la historia y la identidad americana.
Las calles de París aún reconocen sus pasos. Alejo Carpentier murió el 24 de abril de 1980. Su obra se extiende más allá de su tiempo y se traduce en varios idiomas para multiplicar la creación.
Aún se percibe su calor en la transformación de Mackandal, en las ansias de libertad de Ti Noel, en el idealismo de Esteban, y en la tensión que viven Vera y Enrique debido a la Segunda Guerra Mundial.
Carpentier es de esos escritores necesarios para explorar cada día posible la universalidad de millones de hermanos.