Estas cualidades le permitieron colaborar en la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista desde otra trinchera: el periodismo. Junto a Abel, Melba, Jesús Montané y otros, inició ese combate a través del periódico “Son los mismos”, el que posteriormente cambiaría su nombre por “El Acusador” a propuesta de Fidel Castro.
Raúl Gómez García fue también autor del Manifiesto del Moncada, un documento que recoge la voluntad de la generación del centenario de no dejar morir los ideales de Martí, así como su compromiso de cambiar el rumbo de la historia.
De la autoría de este joven apasionado por la literatura es el poema “Ya estamos en Combate” el que fue leído momentos antes de que los asaltantes partieran a la acción, pero esas no fueron sus últimas letras ya que a mano de su madre Virginia García, llegó un breve escrito titulado “Caí preso, tu hijo”, prueba de los crímenes cometidos por la tiranía batistiana contra los jóvenes asaltantes.