A diario siete mujeres imprimen en cada jornada su huella. De sus desvelos no hablan, pocas veces de sus sueños personales, porque su oficio las sabe pendientes en cuerpo y alma de una obra que absorbe cada minuto, cada instante ávido de soluciones, ideas, mucha fuerza de espíritu para que todo sea mejor.
Aunque no eligieron ser periodistas, aunque quizás nunca imaginaron estar frente a un medio de comunicación, la vida, ese camino que siempre reserva sorpresas (más su desempeño), un buen día las descubrió decididas a emprender una nueva tarea: dirigir un órgano de prensa.
Desde entonces, el descanso ha resultado palabra equivocada, en su lugar jornadas que van más allá de las correspondientes a su horario laboral, eso se llama entrega. Pérdida de sueño ultimando detalles para que todo funciones de mejor manera, eso se llama pasión y capacidad para resistir los tropiezos que nunca faltan. Así se arman sus días, semanas, meses. Así les va la vida a siete mujeres de Mayabeque, directoras de Medios de Comunicación Masiva.
Aprendieron en el camino y aprenden. Cultivan el arte de arropar la creación. No siempre todos coincidirán con ellas, tal vez hasta en algún momento aparezca el enojo, pero cada día vuelven a la batalla, esa que requiere de amor y coraje, de sacrificio, de fuerza para seguir empinando la obra que es de todos, pero ellas son las que responden por lo bueno y por lo que no llegara a resultar así.
Cada día, lleva un poco de todas. El periódico, la televisión provincial, los telecentros municipales y las emisoras territoriales que dirigen son parte de sus vidas. Les resulta casi imposible separar esa responsabilidad cuando regresan al hogar; en ocasiones una llamada telefónica anuncia nuevas tareas, compromisos, y vuelve entonces ese espectro que las hace regresar a la misión cotidiana, al deber que no siempre les permite el descanso merecido pero que sí las sabe mujeres altruistas.
Llega este día, y no pude resistirme a mencionarlas, a reconocer el hacer de Yuliet Romero, Amparo Álvarez, Dalia Reyes, Marianela Tápanes, Rosabel Álvarez, Vilma Leyva y Yensy Rivera, siete mujeres que en Mayabeque despiertan al Sol para aceptar el desafío que les reserva este tiempo, en el que amar y luchar por un mundo mejor requiere de su aptitud para fraguar la maravilla. Por ese este Día de las madres, preciso hablar de ellas. ¡Felicidades!
