Justamente este 30 de junio se cumplirá 60 años del prominente discurso de Fidel Castro Ruz como cierre de tres encuentros con artistas e intelectuales cubanos.
En 1961, Fidel mantuvo encuentros con escritores, artistas e intelectuales los días 16, 23 y 30 de junio en la Biblioteca Nacional de Cuba, cuya intervención de esa última jornada es inmortalizada como Palabras a los Intelectuales, argumento devenido tribuna de la política cultural de la Revolución.
Sin vacilaciones, junio de 1961 imprimió el estreno del coloquio fluido y decoroso entre las vanguardias política e intelectual cubanas. Como resultado de las discusiones nació la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) en agosto del propio año. Brotó bajo el vistazo respetuoso de Fidel, quien, esencialmente en el quinto congreso de la organización en 1993, en medio de la crisis económica, también advirtió gracias a su sentido de apremio: La cultura es lo primero que hay que salvar.
El discurso de Fidel constituía un documento rector que contiene los principios básicos de la política cultural cubana, sobre todo, en el sentido de comprender con la cultura, el movimiento artístico y las producciones, a la mayor cantidad de personas posible.
En su intervención final en Palabras a los Intelectuales, Fidel expresó, () dentro de la Revolución todo; contra la Revolución nada, frase que en muchas ocasiones ha sido manipulada y hasta descontextualizada si se tiene en cuenta en los instantes en que se enuncia.
Palabras a los intelectuales devino estrado de acción de la Revolución en el sector de la Cultura, el cual pasó a la primera línea de defensa de esta causa emancipadora que llevó la irradiación de los pensamientos a un sinnúmero de de desamparados en todo el territorio nacional.
