La celebración del Día Internacional de los Trabajadores marca en Cuba todo un acontecimiento que desde 1959 alcanza una dimensión especial: se trata de una fiesta del movimiento obrero.
Ese primer día del quinto mes de cada año, se dan cita los trabajadores en un desfile que también une a la familia cubana, es ocasión para el reencuentro de amigos y trasciende con esa exclusividad que propicia andar en tierra libre.
Las iniciativas de los sindicatos, pancartas, banderas, los colores de la bandera cubana habitan en el desfile de cualquier lugar del país que muestra además la peculiaridad de los nacidos en la mayor de las Antillas, esa que distingue su valor y la alegría.
San José de las Lajas arriba a esta efeméride con alegría; sus hombres y mujeres, trabajadores, campesinos, estudiantes, jubilados asumen la voluntad de defender cada conquista y fortalecer la unidad, un digno saludo al primero de mayo.
