A las puertas del Primero de mayo

0
146

La celebración del primero de mayo en Cuba es además de un trascendental desfile en toda la isla un día de encuentro, donde actuales y antiguos compañeros de trabajo coinciden en una cita donde abundan carteles, banderas, se escuchan consignas y priman los colores de la bandera, el blanco, el azul y el rojo.

Hace unos cuantos años, casi todos los primeros de mayo llovía, pero ni la lluvia impedía que aquel suceso volviera cada año a marcar en el calendario un día diferente, de confraternidad, de alegría y entusiasmo.

Previo a la fecha los colectivos laborales y estudiantiles engalanan sus fachadas, y la dirección del movimiento obrero en cada localidad organiza acciones de salutación a la efeméride además de la organización del desfile; de ahí que cada sindicato decida por iniciativas para ese día.

La celebración del Primero de mayo, es también homenaje a aquellos que dieron  hasta su último aliento por el bienestar de los trabajadores, entre ellos Lázaro peña, reconocido como “el capitán de la clase obrera”.

Fue un líder respetado y muy querido, predicó con el ejemplo y entregó todas sus energías a la Central de Trabajadores de Cuba la cual fundó el 28 de enero de 1939 y de la que resultó electo como secretario general.

Tras el primero de enero de 1959, Lázaro continuó su labor como líder sindical, cuando hablaba a los trabajadores, se sabía que estaba el corazón puesto en cada palabra, no tenía que convencer  sobre lo que decía, la autenticidad y firmeza siempre arroparon sus discursos, que eran francos intercambios con los obreros.

Este Primero de mayo que casi llega, más allá de recordar a quien ganó un lugar cimero en la historia, es preciso defender el legado que como lección imprescindible dejó a todas las generaciones que llegaron después, es necesario tener siempre presente su honradez, humanismo, capacidad y autoridad para seguir haciendo caminos.

 

Califiquenos

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Nombre