En las más diversas tareas se yergue la juventud cubana; en el estudio, el trabajo y en la preparación para la defensa de la patria las nuevas generaciones están siempre en primera fila.
Médicos, científicos, maestros y especialistas de disímiles profesiones se gradúan cada año en el país como muestra del espíritu de superación de los nuevas simientes, energía que rinde frutos dentro y fuera del país, donde el nombre de Cuba ocupa un lugar cimero gracias a la labor de cientos de jóvenes que dejan una huella imborrable de sabiduría y amor a su paso.
A lo largo de la historia y en las luchas por la independencia muchos jóvenes protagonizaron episodios dignos de admiración y algunos perdieron la vida en el intento de lograr una patria libre, en el cumplimiento de misiones por salvaguardar la Revolución Cubana y en acciones solidarias en otros países.
Dos ejemplos son sin dudas Ernesto Che Guevara y Camilo Cienfuegos, el señor de la vanguardia, dignos exponentes de jóvenes que entregaron en esta lozana etapa de la vida lo mejor de sí por defender una causa justa.
Ambos héroes son hoy paradigmas indiscutibles de las nuevas generaciones, de ellos los cubanos heredamos también la valentía, el arrojo, el espíritu justiciero y el amor por los pobres del mundo. Ese sentimiento con el que en llanos montañas, en cualquier clima y con el lenguaje universal de la amistad los nacidos en esta tierra decimos presente.Porque la juventud cubana ha demostrado estar a tono con su tiempo, en primera fila y como dijera el Che: a la vanguardia
