Una gala político cultural en homenaje a la gesta del Moncada aconteció en San José de las Lajas.
Confieso que siempre me sorprende la emblemática canción de Silvio Rodríguez que anuncia el parto de un corazón desde una era, que vuelve a este siglo 21 con acontecimientos que nos estremecen y signan a este tiempo con arrojo y esperanza, sacrificio y sueños.
Ese fue el preludio del acto que tuvo lugar esta tarde de miércoles, donde la juventud llamó a seguir la ruta de la generación del centenario, a multiplicar fuerzas para el progreso, al combate de hoy por todos los mañanaspor llegar
La danza, la poesía y el canto se unieron en el cine teatro Lajero para fraguar el homenaje a los que decidieron no dejar morir las ideas de José Martí; un puñado de jóvenes que salió a fuerza de convicciones a darlo todo, hasta la vida, por el futuro, ese presente que hoy toca defender a quienes llegamos después.
La décima desde la belleza misma y la originalidad austera, defendida por Héctor Gutiérrez y Aramis Padilla calzó con aires de patriotismo una velada que rindió tributo a la gesta del Moncada, esa que inscribió al 26 de julio de 1953 como un hecho trascendental para Cuba y América Latina.
Un coro espontáneo cantó tomado de las manos Saberse cubanos, la poesía del Indio Naborí dejó a la luz La mañana de la santa Ana y desde la danza y el canto, el canto y la danza vibró el sentir de quienes evocaron la epopeya del Moncada desde tierra lajera
Y es que el homenaje se arropó de cultura, manifestaciones del arte aunaron sus purezas para hacer un canto especial, una épica jornada plena de respeto y admiración por aquellos valerosos jóvenes que asaltaron la historia para garantizar el latir de la esperanza, el palpitar de un tiempo diferente y así la paz, la vida.
