La implementación de buenas prácticas agrícolas es el propósito fundamental de los técnicos e investigadores vinculados al Proyecto de Innovación Agropecuaria Local (PIAL) del Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas (INCA) en San José de las Lajas, capital de Mayabeque.
Para ello mantienen desde su creación en el año 2020, el estrecho vínculo entre científicos y campesinos para una labor más efectiva en el surco y mejores resultados, traducidos en el incremento de las producciones en aras de una agricultura sostenible.
En la cuarta fase de este proyecto, devenido Sistema de Innovación Agropecuaria Local (SIAL) no han detenido su quehacer a pesar del asedio en el presente calendario de la Covid 19. Así lo reafirma la coordinadora nacional del eje de género de PIAL, Máster en Ciencias, Bárbara Benítez Fernández.
El PIAL es un proyecto enfocado en la capacitación para la innovación y comprende entre sus ejes transversales: diversidad genética y tecnológica, transversalización de género, adaptación y mitigación al cambio climático y trabajo con jóvenes.
Según una publicación de la Revista Caribeña de Ciencias Sociales, vocera de este proyecto internacional: “los actores de mayor protagonismo en SIAL son la comunidad de personas que habitan en la localidad, las autoridades, los técnicos y los agricultores; quienes necesitan ser educados para transformar los sistemas agrarios, mediante un proceso participativo que incluya no solo los conceptos y las bases teóricas para entender los procesos ecosistémicos, sino que facilite las prácticas para aprender y el intercambio para compartir experiencias”.