La historia internacionalista de nuestros médicos se remonta a 1963, cuando aquella Brigada cubana de galenos partió a Argelia. Años después el Comandante en Jefe Fidel abanderó el Contingente Henry Reeve para enfrentar grandes desastres y epidemias, cuyos miembros hoy manifiestan su disposición de estar presentes donde sean más necesarios tanto dentro del territorio nacional como en el país que lo requiera, prevaleciendo siempre como principio la voluntariedad.
Junto a cada uno de nuestros profesionales de la salud va la imagen y el pensamiento del eterno Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz cuando expresó que ser internacionalistas es saldar nuestra propia deuda con la humanidad, y confirmó el concepto de que la solidaridad y el sacrificio por los demás, dentro y fuera de la patria, clasifican entre las flores más hermosas de la Revolución Cubana.
La colaboración médica en otras tierras del mundo es uno de los programas priorizados para el sistema de Salud Pública cubana, bajo la premisa martiana de que “Patria es humanidad”.
Durante 63 años los profesionales de la Salud Pública Cubana han prestado sus servicios a los pueblos de América Latina, Medio Oriente, Asia, África y Europa.
