Las competencias profesionales en la economía agropecuaria es un factor determinante.Ello implica la necesidad de concebir un modelo que integre la “competencia” en el agro: la disputa por la tierra y el capital. A partir de ello los productores agropecuarios deben pugnar no sólo por el capital como estructura de financiamiento de la producción sino también por el acceso a la tierra, ya sea por medio de la propiedad o el arrendamiento.
Elevar la competencia profesional de los egresados de la Carrera de Mecanización Agropecuaria, base de la Ingeniería Agrícola es una tarea de primer orden, en la Universidad Agraria de La Habana “Fructuoso Rodríguez Pérez” de Mayabeque, es por ello que a pesar del perfeccionamiento en que se ha visto la Educación Superior Cubana y la elevación de la calidad del proceso docente-educativo aún subsisten insuficiencias derivadas de la aplicación uniforme del currículo, ya que no se tiene en cuenta la diversidad de condiciones en que se manifiestan los procesos tecnológicos integralmente, que caracterizan las diferentes esferas de actuación donde actúa el Ingeniero mecanizador agropecuario (García de la Figal y Callejas, 2007).
Se debe propiciar que el proceso docente-educativo, caracterice mejor el objeto de la profesión en diversas condiciones de desarrollo tecnológico y socioeconómico, conciba las competencias profesionales en la formación del graduado, en correspondencia con las características y naturaleza de los procesos tecnológicos y logre un desempeño adecuado en tales condiciones, como dimensión integradora de los contenidos en la solución de los problemas profesionales.
El objetivo del modelo de formación del profesional está encaminado a la concepción de un currículum que tenga en cuenta todos los factores que inciden en las peculiaridades de la profesión, como son las características de los procesos tecnológicos y biotecnológicos en los sistemas de ingeniería y, en especial, la diversidad de estos procesos en las esferas de actuación del Ingeniero Agrícola que en ellos se manifiestan.
Del mismo modo, se requiere concebir elevados niveles de integración de los contenidos del currículum, mediante diferentes competencias profesionales en la formación del graduado, estructurándose los mismos sobre la base de problemas reales de la práctica social actual de la agricultura cubana.
El proceso de delimitación de los problemas profesionales por parte del sector educativo, convierte a éste en una configuración que se traslada al proceso docente, en una etapa posterior, como un problema didáctico.
En el contexto de la profesión, los problemas profesionales se abstraen, modelan y conforman, como conjuntos de problemas afines, unificándose a través de la generalización de los mismos de forma coherente y lógica, constituyendo los problemas más generales y frecuentes, al identificarse como genéricos y a los cuales debe enfrentarse el profesional.
Un aspecto importante a considerar dentro del modelo, son las competencias profesionales a lograr en los educandos dentro de su formación académica.
El Modelo del Profesional basado en competencias profesionales, persigue formar un graduado que en su interacción con el objeto de la profesión, transforme los sistemas ingenieriles, resolviendo los problemas que en ellos se manifiestan y satisfagan la necesidad social de contar con los productos agropecuarios y las materias primas necesarias para el desarrollo de la agricultura.
El objeto de la profesión, con las características que introducen las esferas de actuación, los campos de acción, y el desarrollo en estos de las competencias profesionales en los procesos tecnológicos que se llevan al Modelo del Profesional, expresado en la lógica esencial de la profesión: Explotar los sistemas de ingeniería para los procesos tecnológicos y biotecnológicos de la producción agropecuaria sostenible.
