Los clásicos del marxismo demostraron que la cooperativa en sí no puede conducir a cambios radicales en el sistema capitalista, pero genera un movimiento social en contra de la propiedad privada (superada por la propiedad cooperativa), en contra de la desigualdad y el individualismo, con avances y descubrimientos tecnológicos desde finales siglo XVIII y la Revolución Industrial, se sembraron las ideas que sirvieron de base para la organización cooperativa.
Cuba no es ajena a estas formas de propiedad, se trabaja en base al adecuado funcionamiento y mejoramiento de las cooperativas con el objetivo de mejorar el poder adquisitivo de la población, aumentar la productividad de los pequeños productores y brindarles el acceso a un mercado justo, según recoge la Constitución de la República en el artículo 22 inciso b).
Las Cooperativas en Cuba traen como ventaja mejor organización de las fuerzas productivas, mayor motivación de los socios, aumento del sentido de pertenencia, estimula las formas de propiedad colectiva, favorece la redistribución de beneficios con fines humanistas y no sólo de acumulación, aumenta la productividad del trabajo, mejoran los ingresos y los cooperativistas tienen mayores incentivos, sin dejar de mencionar que aumenta la producción con gastos fijos más bajos y menores costos y los beneficios sociales a los cooperativistas y sus familiares.
En Cuba existen 4853 cooperativas agropecuarias de tres tipos diferentes (Cooperativas de Créditos y Servicios), (Cooperativas de Producción Agropecuaria), (Unidades Básicas de Producción Cooperativa), con una membresía de 437830 asociados. Modelo económico cubano.
Las Unidades Básicas de Producción Cooperativas (UBPC) se constituyen por personas naturales asociadas voluntariamente que aportan su trabajo, reciben la tierra en usufructo por tiempo indefinido y su patrimonio lo integran los bienes adquiridos por compraventa o cualquier otro título y los obtenidos como resultado de los procesos productivos que desarrollen.
Gestionan el 26.3% de la superficie agrícola, producen en relación a la producción total del país el 7% de las viandas, el 3 % de las hortalizas, el 22% del arroz cáscara húmedo, el 5% del maíz y las frutas, y el 15% de la leche.
La Cooperativa de Producción Agropecuaria (CPA) es una entidad económica que representa una forma avanzada y eficiente de producción socialista con patrimonio y personalidad jurídica propios, constituida con la tierra y otros bienes aportados por los agricultores pequeños, a la cual se integran otras personas, para lograr una producción agropecuaria sostenible.
Estas gestionan el 8.2% de la superficie agrícola, producen con relación a la producción total del país el 6% de las viandas, el 3% de las hortalizas, el 1% del arroz cáscara húmedo, el 3% del maíz, el 5% del fríjol, el 3% de las frutas, y el 4% de la leche.
La Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) es la asociación voluntaria de los agricultores pequeños que tienen la propiedad o el usufructo de sus respectivas tierras y demás medios de producción, así como sobre la producción que obtienen.
Es además, una forma de cooperación agraria mediante la cual se tramita y viabiliza la asistencia técnica, financiera y material que el Estado brinda para aumentar la producción de los agricultores pequeños y facilitar su comercialización; tiene personalidad jurídica propia y responde de sus actos con su patrimonio.
Las CCS gestionan el 31.9% de la superficie agrícola, producen en relación a la producción total del país el 78% de las viandas, el 72% de las hortalizas, el 63% del arroz cáscara húmedo, el 88% del maíz, el 83% del fríjol, el 82% de las frutas y el 54% de la leche.
Cuba tiene como prioridad ejecutar y hacer cumplir la política para el proceso de fomento, desarrollo y consolidación del movimiento cooperativo en el sector agropecuario, forestal y azucarero, pero aún no se aprecian los resultados que el pueblo necesita.
Es importante cumplir con los principios del cooperativismo; las cooperativas tienen que ser eficientes y sus resultados necesariamente repercuten en el pueblo.
No podemos renunciar a lo que se sabe que resulta una forma de producción eficaz; lograr la eficiencia de las cooperativas agropecuarias en Cuba es tarea de primer orden.
