Para la CIA, el 17 de abril de 1961 fue el Día D. Era lunes, y la Agencia nada dejó al azar. Ni siquiera los entuertos diplomáticos en la ONU, que complicaban por razones puramente técnicas la denuncia cubana contra la agresión.
En la propuesta literaria: Girón: la operación naval, de los tenientes coroneles Augusto César García del Pino Chen y Héctor Mario Almira Heredia, se reúne toda la información escasamente estudiada.
En Girón se verificó la primera batalla aeronaval del siglo veinte en el Caribe, sería muy pertinente conocer sus dimensiones exactas. El estudio, siempre desde la percepción militar, significa la naturaleza de la agrupación táctica naval mercenaria: los grupos de buques de apoyo, de buques de transporte, de demolición submarina, y la flotilla de desembarco.
García del Pino Chen y Almira Heredia, ofrecen en el volumen Girón: la operación naval, los nombres de los buques, los tipos y las cantidades de cargas. Sobre los buques norteamericanos que apoyaron, se especifican el tipo, el numeral y nombre, el desplazamiento máximo, las dimensiones, la tripulación y las acciones realizadas.
En relación con el Plan de Desembarco mercenario, se consignan las playas escogidas en clave, las unidades, la hora aproximada de asalto, las lanchas, los navíos, las instrucciones de navegación, las coordenadas exactas, el sistema de claves, y las indicaciones de radio.
El material es pródigo en documentación histórica y geográfica. Los autores ofrecen datos del Derrotero de las costas de Cuba, del Instituto Cubano de Hidrografía, para entender el teatro naval seleccionado por el enemigo; no obstante, el Día D de la CIA, devino victoria extraordinaria de la Revolución.