Así lo expresó la coordinadora residente y de asuntos humanitarios de las Naciones Unidas en Sudán, Clementine Nkweta-Salami, quien encomió la medida por ser Adre un salvavidas fundamental para cientos de miles de personas vulnerables en todo el país, especialmente en Darfur, en el oeste de esa nación africana, precisó.
En un comunicado dado a conocer este jueves, Nkweta-Salami resaltó que de esta forma podrá continuar llegando la ayuda humanitaria tan necesaria con alimentos, medicinas y refugio a cientos de miles de madres y niños desnutridos producto de la guerra.
El Gobierno sudanés anunció la víspera esta prórroga de la apertura, que estaba en vigor desde el 17 de agosto pasado, pero solo por un período de tres meses.
Adre es el principal punto fronterizo del este de Chad y un importante punto de paso para migrantes, entre ese país y Sudán.
La guerra causó ya la muerte de decenas de miles de personas y se calcula desplazó a más de 11 millones de acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones.
Desde mediados de abril del pasado año esta nación africana se encuentra sumida en una guerra interna tras avivarse las contradicciones por cuestiones de poder entre el jefe del Ejército, Abdel Fatah al-Burhan, y el líder de las paramilitares RSF, Mohamed Hamdan Daglo, luego de que el país sufriese golpes de Estado militar en 2019 y 2021.