“Pon tus sueños en el horizonte y empieza andar” Con esta expresión de Anais Nin se describe a una mujer, cuyo combativo espíritu y su personalidad constante y fuerte la llevaron a conseguir más de lo que le permitía su estado de salud, marcado por la imposibilidad de asimilar el calcio.
Aferrada más a sus facultades que a sus carencias supo ser una excelente madre, social por naturaleza y periodista de profesión dedicada por completo al periodismo que ayuda a reflexionar sobre lo cotidiano, que aporta soluciones, informa, un periodismo de servicio.
“Quería estudiar periodismo porque me gustaba escribir, me gustaba investigar, me gustaba mucho leer, me gustaban las películas de Humphrey Bogart, del cine negro, en las que siempre era un periodista quien descubría todo. Y pensaba: quiero ser ese tipo de persona que investiga y que devela secretos” añadió en su última entrevista la protagonista mi historia.
En la lectura encontró un universo que le permitía andar senderos desconocidos como lo fue la Revista Mujeres, su segunda opción después de graduada; un escenario que consideraba inapropiado y que se convirtió en el centro de sus oportunidades.
Enganchada para siempre a la investigación esta federada fusionó las teorías de género y las de comunicación, fundó la Cátedra, defendió sin límites los derechos de la mujer cubana, incluyó en la prensa el tema de la orientación sexual, la violencia de género y demostró que es la escuela el escenario perfecto para modelar a los niños y jóvenes.
“Siempre me he inspirado mucho en Vilma, en “sus luchas” (en plural), como escribió Fidel en sus Reflexiones el día en que ella falleció. En un país machista y patriarcal es heroico hacer todas las transformaciones que ella promovió: desde crear los círculos infantiles hasta propiciar que los padres estuvieran presentes en el parto. Y yo, durante alrededor de veinte años, cubrí los recorridos que Vilma hizo por el país. Esa oportunidad también fue un acicate, una enseñanza, un taller”.
La batalla de los y las, era precisamente de mi profesora, de la guía de tantas y tantos, de la Doctora en Ciencias de la Comunicación, directora de la Editorial de la Mujer y de la revista Mujeres, la Profesora Titular, Premio a la Dignidad y Premio Nacional de Periodismo José Martí (por la obra de la vida).
En este aniversario 58 de la Federación de Mujeres Cubanas o cuando se quiera hablar de una Vilma, de una federada intachable y de una mujer apasionada se debe hacer referencia a Isabel Moya. A esa valiente que demostró que cuando se es constante se alcanzan horizontes.
