De mis estudios primarios uno de los momentos más especiales, era la visita a la biblioteca escolar; allí la lectura comentada de la bibliotecaria nos transportaba a mundos diversos.
Al escucharla recitar poemas y leer cuentos de escritores cubanos, crecía en mí la necesidad de conocer sobre ellos, la enloquecía con preguntas y ella las respondía con una amable y amorosa sonrisa.
En este espacio me enamore también de las artes plásticas, otra manifestación con la cual me identificaba mucho, pues con ella además de incentivar la imaginación y la creatividad, expresaba a través de ella mis inquietudes, sentimientos y necesidades.
Pero la lectura superaba todas mis expectativas, ese mundo apasionante de los libros me proporcionó instantes inolvidables que en la actualidad ninguna de las nuevas tecnologías de la informática ha podido superar.
Son esas vivencias, devenidas razones las que me permiten considerarla gran importancia las bibliotecas escolares en la promoción de las obras de literatos nacionales, provinciales y hasta municipales. Son imprescindibles para incentivar en los infantes el hábito por la lectura y la investigación.
Las bibliotecas escolares son un escenario educativo orientado a niñas, niños, adolescentes y jóvenes cuya principal misión es incitar el hábito de lectura y conducir al aprendizaje.
