La vejez: una etapa de la vida

0
526
envejecimiento-foto-tomada-radio-angulo
envejecimiento-foto-tomada-radio-angulo

El acelerado envejecimiento de la población en Cuba constituye en la actualidad un hecho que implica nuevos desafíos para nuestra sociedad.Según la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (Onei)se prevé que para el año 2050 el 36,2 % de la población cubana tendrá 60 años o más.

Tales datos corroboran la alta presencia de adultos mayores, cuya esperanza de vida es notable, dada la atención que reciben al constituir una prioridad del país.

Es por ello que esta vez, quiero detenerme en una problemática que directamente tiene que ver con los adultos mayores: el maltrato que en ocasiones reciben.

En ocasiones el maltrato a los ancianos pasa inadvertido. Un gesto brusco, palabras lacerantes, incluso ignorar su presencia u opinión en la toma de decisiones en asuntos trascendentes o no que los involucre, constituyen los principales ejemplos.

Este tema ha ido ganando una mayor visibilidad en los últimos años; aunque sigue siendo uno de los tipos de violencia menos abordados.

Puede adoptar diversas formas, como el maltrato físico, psicológico y el abuso económico. También puede ser consecuencia de la negligencia y desatención, ya sea intencional o no.

Un estudio realizado en 2017, basado en varios estudios en 28 países de diversas regiones, evaluó que, durante 2016, el 15,7% de las personas de 60 años o más fueron sometidas a alguna forma de abuso.

También se hace evidente, en algunos casos, el rechazo y abandono de algunos adultos mayores por sus hijos o familiares; dejándolos a cargo de las instituciones sociales dirigidas a su cuidado y atención.

En nuestro país, también la emigración ha marcado la vida de muchos ancianos,quedando al cuidado de terceras personas, o por el contrario de ellos mismos, a merced de ayuda económica y la visita cuando sea posible.

Considero que el respeto a los derechos de las personas de esta edad debe ser una máxima para todos, ya que también transitaremos ese difícil camino hacia la vejez.

Permitamos que nuestras acciones estén invariablemente caracterizadas por el amor y la paciencia hacia aquellos que ya peinan canas. La familia, debe tener en cuenta a quienes un día la crearon, sus sacrificios e in condicional apoyo, merecedor de total gratitud.

La vejez es una etapa de la vida ávida de respeto, cariño, comprensión y no maltrato; es menester cuidar hasta la mirada que dedicamos a esos adultos mayores que han sido decisivos en la realización profesional de hijos y nietos, en el cuidado de la familia toda sin escatimar esfuerzo ni sacrificios.

Como expresó el más universal de los cubanos, José Martí: “No hay cosa más bella que amar a los ancianos; el respeto es un dulcísimo placer… Los ancianos son los patriarcas”.

 

5/5 - (1 voto)

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Nombre