“En la música, es más bello lo que brota de ella que ella misma”.
José Martí
Con la melodía peculiar del Himno Invasor, Adrián Leandro Isaac Alcuria regala también por estos días un aplauso a los profesionales de la Salud Pública Cubana. Esos que arriesgan sus vidas en el enfrentamiento a la COVID – 19, dentro y fuera de nuestras fronteras.
Justo a las 9 de la noche, la hora del cañonazo, el pequeño de 12 años, estudiante de segundo año de trombón de la Escuela Provincial de Música, Arístides Soto” Tata Güines”, con las armoniosas notas de su instrumento, invita a los vecinos de buena parte del poblado de Jamaica a iniciar el ya tradicional homenaje.
A esta se suman otras notas salidas del instrumento de vientos del pequeño para agasajar a este ejército de amor, pero con especial entusiasmo, desde su mocedad, prefiere regalar esta, una marcha guerrera compuesta por Enrique Loynaz del Castillo, en momentos en que el contingente invasor dirigido por Antonio Maceo marchaba victorioso hacia Occidente.
Mientras Adrián toca el hermoso himno se suman los aplausos, que crecen en cada jornada como muestra del agradecimiento del pueblo a los profesionales de la salud, protagonistas de este combate contra la muerte y quienes con su actuar, hacen historia.