La Habana está de cumpleaños y la celebración es de todos porque a todos nos pertenece. Suman este 16 de noviembre 504 años de su fundación y es imposible no reverenciar su impronta.
La Habana es seductora, más allá de las desgarraduras del tiempo, renace, cautiva, abraza a poetas y cantores que la convierten en hermosas poesías y canciones y se hace luz más allá de los siglos vividos.
Recorrer sus calles es descubrir su historia, el embrujo de una ciudad que desde el devenir del tiempo palpita y enamora, que ha sentado recuerdos y sitios imprescindibles a los que se recurre siempre, aunque sea a través del pensamiento.
La Habana es hembra, guerrera y dama a la vez, impetuosa, cálida, alegre, La Habana es Cuba; con ella se establece un pacto para toda la vida y es regresar una y otra vez, es saberla perpetua en el recuerdo, añoranza y meta; es cúspide y pertinente anfitriona que no se permite caer en el olvido.
La Habana es también un poco Eusebio Leal, ese historiador que la amó y describió desde la percepción infinita, cual eterno enamorado que nos convidó a recorrer sus calles y distinguir en ellas lo sublime, los sitios y hechos que la hacen exclusiva.
Hoy está de cumpleaños la capital de todos los cubanos y en ella me siento hija, conquistadora y conquistada porque allí fui feliz, allí respiro profundo cuando regreso y allí anidan hermosos recuerdos, de esos que alimentan el alma.
Habana, hecha canción se hace eterna;
A ti llega mi canto como el gemir de violines que solo tocan para ti…
Vamos a andar La Habana, amor, pegándonos al mar. Apunta el día y la ciudad se quiere levantar…
Habana, si mis ojos te abandonaran, si la vida me desterrara a un rincón de la tierra, Yo te juro que voy a morirme de amor y de ganas, de andar tus calles, tus barrios y tus lugares
Bautizada en 1519 como Villa de San Cristóbal de La Habana, hoy con más de cinco centurias que abrigan historia y esperanzas, imágenes que enaltecen su esencia de ciudad que une lo antiguo y novedoso, La Habana, La Habana mía y de todos se adjudica hoy un lugar en titulares porque vuelve a ser noticia y se hospeda para toda la vida en nuestra memoria y corazón.
