Pioneros de cuarto grado de la escuela lajera Camilo Cienfuegos |
Fotos: Michael García Pérez
Muy temprano en la mañana de este lunes, arribé a la escuela Camilo Cienfuegos junto a mi niño Marcos Alejandro y mi esposa Dunia. El reencuentro con la escuela donde cursé mis estudios primarios me trajo maravillosos e inolvidables recuerdos.
Ahora es Marcos quien transita por ese sendero que en épocas pasadas caminamos sus padres. Ahora es la vida quien le ofrece la oportunidad de adentrase en un mundo de sacrificios, pero también de emociones y sabiduría.
Arribar a Camilo Cienfuegos, y escuchar la música de la cantautora de canciones infantiles Rosa Campo, fue, sin lugar a dudas, un buen comienzo para los niños que hoy retornan a las aulas para cobijarse en las enseñanzas de sus maestros. Para quienes por primera vez pisan las aulas de este centro escolar, también es un buen comienzo.
Los abrazos de los pioneros, el beso a sus profesores, la alegría de los padres…marcaron el comienzo de un curso donde la calidad y el humanismo estarán presente, donde el amor anidará en el corazón de todos.
Un nuevo curso escolar ha comenzado; las aulas vuelven a cobrar su protagonismo. Los niños crecerán entre alegría y enseñanzas.