El Trabajo Social con el adulto mayor ha de ser visto con una perspectiva renovadora, que deje atrás viejos preceptos como considerar a los ancianos seres incapaces de llevar adelante una vida activa y llena de motivaciones.
Este procedimiento debe estar basado en el progresivo envejecimiento no solo en Cuba, sino en la mayoría de los países del mundo.
Estudios realizados por expertos en San José de las Lajas capital de la joven provincia Mayabeque, reflejan que cada vez son más las mujeres y hombres con más de 60 años de edad y son menos los nacidos.
Los adultos mayores son el grupo etario más nutrido y que más atenciones demanda; se impone entonces prepararse para su adecuado tratamiento y atención.
El cuidado a quienes transitan por la tercera edad no puede verse como mera asistencia a personas enfermas o discapacitadas, sino como la atención a seres humanos que están en una etapa trascendental de cambios y transformaciones en la vida personal y social.
Especialistas del sector de la salud en el territorio y trabajadores sociales aplican encuestas, tanto orales como escritas, a la población incluida en este rango y a sus familiares.
La aplicación de dichos instrumentos permitió una coherente planificación de actividades en beneficio del adulto mayor, conociendo así sus intereses, preferencias y necesidades.
Prioridades para la tercera edad
De este modo se les propicia prioridad en atención médica en algunas especialidades como la Odontología para la realización de prótesis dentales, atención por parte de fisiatras y entrenadores para el oficio en las salas de rehabilitación de los policlínicos locales “Rafael Echezarreta” y “Turcios Limas “
En el Centro Municipal de Higiene y Salud Mental con una frecuencia semanal la licenciada en Psicología Odalys Mantilla Dieppa les brinda terapias en grupo a los longevos que requieran de orientación y consejos, para llevar adelante cualquier dificultad en el seno familiar o personal.
En estos encuentros intervienen además miembros de la familia que en muchos de los casos fungen como cuidadores, recibiendo ellos también nociones acerca de vías y procedimientos factibles para cuidar de estas personas avanzadas en años.
No menos importante resultan los cuidados que profesan los trabajadores de la Casa del abuelo “Ramón Meriño Corbeller” y del Hogar de Ancianos “Vitalio Acuña”, ambas instituciones situadas en esta demarcación, donde se les planifican actividades culturales y recreativas además de una dieta alimenticia adecuada.
El paso del tiempo trae consigo situaciones que para el ser humano son inevitables, un fiel ejemplo de ello es el envejecimiento. La ayuda de todos a favor de un estilo de vida activo garantiza una vejez sana.
