Por más que se promueva la necesidad de evitar el consumo de drogas, el flagelo sigue presente en las comunidades y a diario se sienten los efectos catastróficos sobre la conciencia, la personalidad y el comportamiento del hombre en la sociedad.
En San José de las Lajas, capital de Mayabeque, el empeño de especialistas y educadores se trasluce en múltiples acciones con los lugareños, especialmente, con los jóvenes para enfrentar y no llegar a esa mala elección.
La Dirección Municipal de Educación prevé en los programas de estudio y a través de la Biblioteca, la realización de charlas, conferencias, debates y la presentación de audiovisuales para educar en las nuevas generaciones el rechazo por el tabaquismo y el alcoholismo, así como el consumo de otras drogas.
Con la colaboración de los especialistas de salud, los educadores en centros de enseñanza media y en los planteles universitarios, la Universidad Agraria “Fructuoso Rodríguez” (UNAH) y el Centro Universitario Municipal (CUM), se desarrollan intercambios de experiencias y presentación de filmes didácticos que muestran las fatales consecuencias del uso de drogas.
Otra vía para el trabajo antidroga es la Casa de Orientación de la Mujer y la Familia en esta ciudad cabecera de provincia. Las federadas junto a sus hijos y esposos reciben sistemáticamente consultas dirigidas a evaluar casos específicos donde se hace necesaria la propuesta de actividades sanas que sustituyan al mal hábito de fumar o consumir bebidas alcohólicas.
Y como todo lo que se haga es insuficiente para atacar a este enemigo de las personas, existe una línea confidencial antidrogas, el 103, auspiciada por ETECSA que proporciona, a través de la comunicación telefónica, el consejo oportuno para quienes acceden a la ayuda, pero de forma discreta.
Desafortunadamente muchas personas no han concientizado que las drogas destruyen al ser humano y sus consecuencias se extienden a toda la familia. A eso la doctora Odalys Mantilla Dieppa, en su consulta del Centro de Salud Mental se refiere con los pacientes que de forma habitual asisten a esa institución de salud del territorio lajero.
Especialistas lajeros en ese centro insisten en que entre las drogas legales se encuentran el café y el tabaco, pandemia mundial de enfermedad y muerte, mientras el alcohol puede presentarse de manera severa en la conducta del ser humano.
También existen las ilegales como la cocaína, la marihuana, la heroína y la amplia gama de las que tienen origen natural y sintético y a ellas va dirigida la tarea de los organismos cubanos en las costas y aeropuertos para evitar su entrada al país.
Cifras globales reportan que el alcohol esclaviza a más de 200 millones de personas en el mundo y a causa del tabaquismo unos 5 millones de personas pierden la vida, lo que supera a la pérdida de vida por Sida, que es otro flagelo que azota a la humanidad.