Esto no lo salva ni el médico chino, así opinaba la gente hace unos meses atrás del restaurante más céntrico de la capital mayabequense: El Chino. Sin embargo, ni médicos, ni chinos son los que trabajan actualmente en el lugar, bajo la dirección de su nuevo administrador Roger Franchy.
Un lajero con amplia experiencia en la gastronomía. Muchos lo recuerdan desde que se desempeñaba como barman en el restaurante Vita Nuova, después en su efectiva labor como administrador del restaurante El árabe en las Escaleras de Jaruco, más tarde como líder de la Paladar La Favorita, este ferviente trabajador de nuestro municipio San José de las Lajas acopia innumerables lauros en el arte de servir y complacer.
Gracias a sus esfuerzos y al interés de su colectivo El Chino está totalmente salvado de la pésima calidad de la comida y el servicio que antes tenía. La demanda que hoy posee este centro gastronómico se debe ante todo al buen trato. Los 20 trabajadores de esta unidad se empeñan en transformarlo y hacer que los clientes disfruten de una velada agradable y diferente.
Con responsabilidad, constancia, además de un gran profesionalismo se ha logrado en pocos meses un sitio especializado en comida oriental, muestra de ello son los excelentes platos de arroz frito, maripositas chinas, y sopas. Al menú se le suman los platos criollos, como el congrí , el cerdo, pollo, camarones, pizzas y un sinnúmero de platos fuertes. Hay además cocteles y postres, y que no pueden faltar los excelentes tragos del bar.
Son también méritos del actual restaurante EL Chino son la ambientación, con mesas y sillas vestidas, en perfecta armonía, vajilla impecable, servilletas , climatización, baño con agua corriente, además de la decoración asiática.
Y por supuesto, los precios de todas las ofertas que son accesibles a los trabajadores y sus familias. De 12 del mediodía a 10:00 de la noche y de lunes a domingo, usted puede asistir al centro que trabaja por el sistema de reservación por la cantidad de personas que desean entrar al lugar.
Pero este colectivo no está aún satisfecho. Aspiran a corto plazo, a mejorar las cortinas y alfombrado de la entidad, para lograr mayor intimidad y confort. Además de otras acciones para alcanzar la perfección en la higiene.
El Chino es ahora un símbolo de la tradición lajera y representa al pueblo en su condición de amante del buen gusto y el trato excelente. Visítelo pues y no saldrá defraudado.