Desde 1973, a solicitud de la Asamblea General de las Naciones Unidas, se celebra cada cinco de junio el Día Mundial del Medio Ambiente, festejo que pretende sensibilizar a la población sobre el cuidado y conservación del mundo en que vivimos a partir de la idea de que somos parte de la naturaleza.
En San José de las Lajas, capital de la provincia Mayabeque, hombres y mujeres laboran en pos de preservar el entorno y así garantizar la calidad de vida de los pobladores.
Desde el polo científico ubicado en la localidad, investigadores y técnicos elaboran productos favorables para el desarrollo agrícola que no son agresivos con el medio ambiente, tales como: QUITOMAX, ECOMIC y ASOFER. Asimismo, laboran en las variedades de frijol, arroz, tomate, papa y otros alimentos de primera necesidad en la mesa cubana.
Otro grupo de científicos lajeros trabajan en función de mitigar el cambio climático. Utilizan la caña de azúcar y sus derivados en la alimentación animal y aplican programas genéticos en aves, porcinos, conejos y rumiantes de leche y carne.
En tanto, los profesionales del Centro Nacional de Sanidad Agropecuaria, CENSA, producen medicamentos y vacunas para uso veterinario, agrícola y humano y desarrollan sus tecnologías para combatir las plagas.
Pero esta no es una tarea únicamente de aquellos hombres y mujeres de ciencia, la población debe asumir su roll en torno al medio ambiente; por ello es preciso no talar los árboles, no cazar especies en peligro de extinción, evitar fogatas en los bosques, no arrojar basuras en las playas y mares y cuidar cada día la higiene de nuestras viviendas y sus alrededores.
La efeméride del cinco de junio, Día Mundial del Medio ambiente nos regresa al pensamiento martiano cuando dijo: “La naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece, y prepara para la virtud al hombre. Y el hombre no se halla completo, ni se eleva a sí mismo, ni ve lo invisible, sino en su íntima relación con la naturaleza”.
Esta fecha convida a crear tu propio entorno verde, a purificar el aire que respiramos todos, solo así podremos hablar de calidad de vida.