El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, en transmisión conjunta de radio y televisión, presentó las pruebas del atentado en su contra ocurrido el pasado 4 de agosto.
Aún hay involucrados en los hechos sin capturar. Se trata de Rayder Alexander Russo Márquez, radicado en Colombia, y Osmán Alexis Delgado Tabosky, residente en ee. uu., ambos son solicitados por la justicia venezolana, según informa Telesur.
Juan Carlos Monasterios, otro de los implicados, se encuentra detenido y ha dado detalles sobre quiénes los contrataron, entrenaron y financiaron desde Colombia. Reveló, además, la participación del diputado venezolano Juan Requesens, también capturado.
Paso a paso: Las pruebas del atentado
Un dron fue ubicado en el centro empresarial Cipreses por el grupo número 2, llamado grupo Bravo. Fue levantado desde el piso diez, por un grupo terrorista entrenado en una finca llamada Atalanta en Chinacotá, municipio colombiano de Santander.
Ellos habían hecho observaciones de la preparación del desfile del 24 de julio en el estado de Carabobo y del 5 de julio cuando se celebró la declaración de independencia, pero desecharon hacerlo esos días porque no estaban preparados.
Recibieron la confirmación de que el acto del 4 de agosto iba a ser en la avenida Bolívar, el viernes en horas de la tarde. Entonces, como el acto no sería en Los Próceres, trasladaron el dron. Paralelamente había un segundo dron, que fue levantado por otro grupo.
Estaban planificados dos drones, el primero explotó con un componente de pentrita y pólvora, y el segundo se desorientó y chocó contra el edificio Don Eduardo, cayó y explotó con un componente de c4 y pólvora.
Se confirmó que era un atentado en pleno desarrollo. A los diez minutos habían atrapado a dos personas con un comando de drones, que parecían estar involucradas en el hecho. Fue gracias a la inteligencia popular que se dio la inmediata captura de estos terroristas.
Los autores intelectuales del intento de magnicidio participaron en los hechos violentos del 2017 en Venezuela. A los involucrados en el atentado se les ofreció 50 millones de dólares y estadía en ee. uu.
Todas las declaraciones apuntan a Julio Borges, quien vive en Colombia. Se trata de un dirigente opositor venezolano que ha estado involucrado en todos los actos violentos en la nación.