Así como al naranjo le pueden nacer al azar mayor o menor cantidad de frutos, a Rosabel Almenares Díaz maquillista de Telemayabeque le fue seleccionado el nombre , sin advertir que en el futuro la designación nominal que la distingue se difundiría como pétalos florales regalando colores en los camerinos a los rostros que dan luz a la palabra.
Su inclinación por esta modalidad artística encaminada a dibujar motees en tapices humanos emana de la niñezcuando apenas con cinco años de edad,hacía nacer la sonrisaen la cara de sus muñecas, con el creyón labial de mamá, o transformaba a su bebé en un niño asiático prolongando el ángulo de los ojos con un lápiz de color negro intenso, solía entonces enaltecer las mejillas de Brenda adicionando carmín, diseño que luego hacía llegar a su propia catadura para que parecieran gemelas
Luego pasaron los años y con ellos la vocación se afianzó a cursos de superación y escuelas de arte para convertirse en una verdadera profesional de la delineación facial.
Actualmente disfruta su quehacer maquillando a periodistas y locutores del “Noticiero provincial”, conductores del programa cultural “Luces” o a niñas y niños que como jazmines asoman su frescor en el espacio infantil “Doble Clic”. Para cada uno de ellos utiliza una manera diferente de retoque, puede transformar la expresión de cansancio después de intensa horas de labor de un periodista en una imagen vigorosa que se corresponda con la información más actualizada, también sabe dela magia para iluminar con mayor ahínco la belleza pueril de quienes presentan sus dotes histriónicos en la pequeña pantalla
Como Rosabel existen muchos otros hacedores delarte que viven en el anonimato y aunque su nombre aparece registrado en los créditos de cada emisión, su rostro que da vida a tantas fisonomías, permanece oculto, aunque rayitos de su mirada profunda y la ternura de sus palabras van adicionadas a esa imagen que los televidentes saben apreciar.