En las dos últimas décadas los padres en los países desarrollados han sido testigos una serie de fenómenos en los menores de edad que hasta entonces no habían llegado a la categoría de “preocupantes”: La obesidad infantil, la violencia en las aulas, el estrés y la depresión en los menores, los embarazos no deseados y el fracaso escolar han pasado al primer plano de las intranquilidades tanto de los progenitores como de los gobiernos de los estados, y es que la incidencia de estos problemas se ha incrementado de maneraalarmante.
Ante estas observaciones profesores de Educación Física,entrenadores, atletas y trabajadores del complejo “Voluntario Deportivo Nelson Fernández” de San José de las Lajas conjuntamente con especialistas de la salud de la localidad realizan múltiples estudios y coinciden en ciertos aspectos que influyen en los problemas mencionados como malos hábitos de alimentación, escaso tiempo que pasan los padres con sus hijos, débil educación en valores, y escasa cultura del esfuerzo y empleo del tiempo libre
A partir de ese análisis los especialistas lajeros han divulgado posibles soluciones desde el punto de vista familiar, psicológico, alimentario, educacional e incluso médico, y todas ellas en vínculo directo con la comunidad y con especial énfasis en la educación física.
Y es que la Educación Física hace que los niños se interesen por su cuerpo y su salud, lo que llevará a que desarrollen hábitos saludables. Los niños que hacen deporte son mucho menos propensos a consumir drogas, beber alcohol y fumar cuando se hacen adultos.
Es un medio integrador que fomenta el trabajo en equipo, el compañerismo, la socialización y el respeto a los demás, permite un mayor autocontrol y los brotes violentos disminuyen.
El deporte enseña a conocer y respetar el propio cuerpo, fomenta la competitividad y prepara al niño(a)para enfrentarse a las victorias y a las derrotas, por tanto también al desempeño profesional de la vida de adulto.
La realización de ejercicios físicos eleva la autoestima y el respeto hacia uno mismo, mejora sustancialmente el estado psicológico del niño(a) y contribuye no solo al desarrollo físico, sino también mental del individuo mejorando su concentración,su fuerza de voluntad, la orientación y capacidad de discernimiento.
La práctica del deporte permite alcanzar un estilo de vida saludable y longevo, aprender esa realidad desde temprana edad influirá en que las personas padezcan menos enfermedades y sean más óptimas.
