Es bueno que lo exponga aquí, de ese modo esclarecemos y exponemos nuestros puntos de vistas, coincidentes o no con los de otros.
Nunca hablamos de la relación sociedad-Estado, pero le recomiendo leerse de Engels “El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado”, para que vea la relación directa y dialéctica de ambos.
También le recomiendo el estudio y la lectura de la obra de Lenin, “El Estado y la Revolución”.
Con ambas podrá entender cómo la sociedad se organiza en un sistema complejo que denominamos Estado y cómo este regula, dirige y organiza a la sociedad.
Hoy no es posible separarlos. Según los “clásicos del marxismo”, un día, se extinguirá el Estado y las clases sociales, como ya fue en la época del matriarcado.
Por otra parte, el Estado, además de estructuras y “aparatos de coerción y coacción”, tiene aparatos y estructuras de beneficio, atención y seguridad de la sociedad y la población.
De hecho, en el caso de Cuba, son más las diseñadas para el beneficio del Pueblo y las “coercitivas” también se ponen en esa función, como el Minint, las FAR, la Fiscalía, el sistema de Tribunales, la Contraloría, los Ministerios con sus estructuras de inspecciones, control, etc.
Ahora, no sé cuál es la decisión “más importante en materia de distorsiones, que, según usted, se pospone” y que no hay voluntad política de asumir.
Un fenómeno es complejo, cuando sobre el mismo inciden varios factores que son muy difíciles de controlar o solucionar de manera aislada y aún más difícil cuando se convierte en un sistema.
En el caso de Cuba, cualquier solución al problema económico pasa por superar con efectividad el impacto directo del Bloqueo total, integral, recrudecido y constantemente actualizado para causar más daño y destruir la Revolución.
La complejidad también está dada por las dificultades de acceder a los beneficios del sistema financiero internacional, bancario y crediticio, ya en años afectados por el Bloqueo, pero ahora más terrible, al estar incluidos en la cínica e injusta lista de países patrocinadores del terrorismo.
Es complejo el escenario por la caída de los ingresos provenientes del Turismo, primero, por el impacto de la COVID y después por las dos primeras causas enunciadas.
Nos golpea la persecución y obstáculos a los servicios profesionales médicos y la limitación a miles de millones de dólares por ese rubro exportable.
La cacería despiadada a cuanto barco con combustibles se acerque a Cuba y la obsolescencia tecnológica de nuestro sistema electro energético nacional. Las termoeléctricas tienen, entre 60 y 40 años de explotación intensiva. Casi todas trabajando con fecha de caducidad.
Ahora bien, si somos competentes o no es la gran pregunta.
Yo creo que sí, pero tenemos que demostrarlo.
También se da tremenda batalla por sacar adelante la Economía del país, con independencia, de flojos, cobardes y gente vividora y descomprometida, que siempre van a existir.
Uno de los objetivos de esa guerra es precisamente desmoralizarnos y que nos sintamos incapaces de vencer todas las dificultades.
Ese es nuestro Gobierno y nuestro Estado, al menos lo asumo y defiendo así, y siempre estaré más encaminado a ofrecerle mi modesta contribución, que a abandonarlo cuando más necesita de mi entrega revolucionaria.