De virtuosa y potente podemos clasificar a la juventud cubana , y serían muchos los adjetivos que conseguiríamos agregar para describir una imagen integra que coincida exactamente con su grandeza … nuestros jóvenes han sido el motor impulsor de los principales cambios sociopolíticos y económicos que han determinado el camino de este país.
Su colaboración impulsora y ligada a la sociedad se ha mantenido como un eje esencial en la equivalencia nacional, defendiendo valores y reclamando el decoro de todos los pobladores en este archipiélago heroico y legendario.
Asumen con vigor tareas productivas e investigativas que promueven el progreso sostenible del estado, innovadores y creativos ofrecen un enfoque renovador en cada diligencia diaria, brindando soluciones novedosas a los retos actuales.
Disposición y responsabilidad constituyen principio básicos, para las nuevas generaciones destacándose por su solidaridad y altruismo , su compromiso y aprendizaje continuo han fortalecido importantes áreas de la economía y los servicios, contribuyendo al progreso y bienestar común.
El profundo patriotismo expuestos por la juventud cubana frente a campañas provocadoras en las redes sociales, acentúan la confianza del Gobierno en sus principios revolucionarios , en su pureza de espíritus , en su heroísmo y capacidad para asumir grandes desafíos, depositando en cada uno de ellos la responsabilidad de construir un futuro mejor para todos.
En todos los tiempos ha demostrado su mérito como protagonista del presente y simiente del futuro, su invariable indagación de mejoras en aras del progreso colectivo la coloca como un sostén fundamental hacia una perspectiva de beatitud y bienestar para todos los cubanos.