El Licenciado en Educación Humberto Águila Pérez, Jefe del Departamento Comercial de la División Territorial de ETECSA en Mayabeque fue un joven que creció con la satisfacción de haber conocido al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.
En el Aniversario 99 del natalicio del líder histórico de la Revolución Cubana, rememora aquellas jornadas de trabajo y aprendizaje que influyeron definitivamente en su carácter.
_ ¿Cómo conoció a Fidel?
Fue una etapa muy bonita. Yo estudiaba en la universidad, era miembro de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU). Vivíamos el año 1999 y Cuba estaba inmersa en el regreso del niño Elián González a la patria. Todas las noches la Dirección de la Juventud, de la FEU, la FEEM y los Pioneros se reunía, ya que éramos los protagonistas de las Tribunas Abiertas que se realizaban en el país. Fidel intercambiaba todas las noches con nosotros para organizar las tareas que al siguiente día se iban a ejecutar.
“Como buen estratega, planificaba, diseñaba y organizaba muy bien cualquier tipo de tarea en aras de que todo marchara como estaba establecido y que el final tuviera éxito y así fue, porque la liberación por Elián tuvo éxito.
_ Durante esos encuentros de trabajo con Fidel, ¿qué aprendió de él?
Cada encuentro con Fidel fue un momento de aprendizaje. Con Fidel se aprendía de todo, porque él lo preguntaba todo. Estaba pendiente hasta del más mínimo detalle.
En este tema del regreso de Elián, él nos enseñó cómo debíamos proyectar la tarea, qué pudiéramos hacer que influyera directamente en el cumplimiento de la misión y que el enemigo no se percatara de la estrategia para que el resultado fuera muy positivo.
“Realmente fueron encuentros muy alentadores y de mucho aprendizaje, porque asimilamos la sabiduría y experiencia que Fidel tenía para asumir una tarea y lograr el resultado propuesto”.
_ ¿Anécdotas con Fidel que pueda compartir?
Una de esas tantas noches de trabajo concluimos a las 4 y 30 de la madrugada y a las 6 de la mañana estábamos nuevamente reunidos con el Comandante porque él quería comprobar lo que habíamos hecho.
“Todos los jóvenes en la universidad estaban durmiendo en su residencia estudiantil y nosotros reunidos tomando decisiones para explicar luego en la mañana a Fidel lo que se iba hacer y dar respuesta a las tareas”.
_ ¿Qué cualidades siempre admiró de Fidel y que influyeron en su formación personal y profesional?
Admiré de Fidel muchas cualidades; pero, sobre todo, la capacidad para saber escuchar a las personas, así como lo hacía, atentamente.
_ ¿Cómo recuerda al Comandante?
Lo recuerdo con mucha nostalgia porque él fue y es, muy importante para la nación. Y yo estoy seguro que todos los cubanos recordamos a Fidel.
“Fidel es el alma de esta Revolución y de este país”.