A propósito de conmemorarse en 2025 el 80 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, el soberano destacó los esfuerzos incansables de quienes han construido la paz y la prosperidad que se disfruta actualmente en Japón.
Subrayó la importancia del respeto a las diferencias y expuso su pesar por las muchas vidas que aún se pierden en guerras y conflictos en el mundo.
Asimismo, defendió la unidad de su pueblo frente a desafíos como los desastres naturales y el aumento del costo de la vida, pues cree que solo el trabajo conjunto permitirá superarlos.
Este 1 de enero se cumple un año del azote de un fuerte terremoto en la región central del país y el emperador manifestó preocupación por los afectados, cuando varias familias de la península de Noto todavía tratan de levantar sus hogares devastados.
También, expuso solidaridad con los afectados por los tifones y las fuertes lluvias del año anterior y dijo sentirse alentado de haber visto a la gente ayudar a los necesitados.
“Rezo para que este año sea uno en el que la gente de nuestro país y del mundo pueda caminar hacia adelante con esperanza”, sentenció.