Hace un poco más de un año la sociedad cubana está inmersa en la bancarización, considerado uno de los procesos más importantes de la transformación digital de la sociedad cubana. Tal y como lo expresó el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (CC-PCC) y Presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en el Pódcast Desde la Presidencia: la bancarización ayuda a reconformar todo un grupo de elementos que son parte del programa de estabilización macroeconómica del país.
Ciertamente no podemos negar los incontables beneficios que brinda para todos la bancarización y aunque las instituciones involucradas invierten sus esfuerzos y empeños, encontramos un sin números de trabas que obstaculizan el proceso y mantienen insatisfecho al pueblo.
Contamos con canales electrónicos de pago: los llamados POS, que no se encuentran en las tiendas en moneda nacional, solo en las de Moneda Libremente Convertible (MLC); los cajeros automáticos; las pasarelas de pago Transfermóvil y Enzona, el monedero móvil; la Banca Remota y algunas entidades estatales tienen el servicio de caja extra.
Pero todo no es color de rosas, en ocasiones los cajeros no tienen dinero, están fuera de servicio o no tienen corriente, y muchas de las cajas extras no tienen efectivo.
Los que cobramos por tarjeta magnética vivimos una odisea para tener en mano nuestro salario, que resulta insuficiente en estos tiempos, pero eso es tema para otro comentario.
Actualmente, la mayoría de los productos de primera necesidad los adquirimos con los negocios particulares, quienes deben tener el Código QR, otra de las facilidades de la bancarización, y sin embargo no es así.
Algunos propietarios de negocios privados alegan que llevan más de seis meses esperando por su Código QR, luego de llenar planillas en el banco, solicitarlo a ETECSA y hasta visitar en reiteradas ocasiones a Joven Club. Otros sencillamente no quieren cumplir con lo establecido.
Sin lugar a dudas, aún son insuficientes las acciones que se acometen para el desarrollo de este proceso y falta control sobre ellas.
La bancarización brinda seguridad, rapidez, comodidad y ahorro económico por las bonificaciones que ofrecen los bancos y las pasarelas de pago; entonces, es menester dirigir la mirada a cumplir con un proceso que aporta al desarrollo de la nación y satisface las necesidades del pueblo.