Una bandera gigante como el amor que le profesan a la tierra que los vio nacer, avanza en manos de los estudiantes de la enseñanza media superior, donde se conjuga el azul de los uniformes con el rojo y el blanco de nuestra enseña nacional.
Con la alegría e inocencia que los caracteriza, los más pequeños también participan en esta fiesta multicolor, desde los niños de los círculos infantiles y sus educadoras, hasta los pioneros de la enseñanza primaria, que llegan con múltiples iniciativas, entre ellas, la banda rítmica de la escuela primaria Camilo Cienfuegos.
Le siguen los alumnos y profesores de la Universidad Agraria de La Habana Fructuoso Rodríguez Pérez, grupo donde predomina el blanco de la flor de la mariposa que dignifica la pureza de nuestros ideales.
Los trabajadores de la ciencia también participan en el desfile, agitando banderas y pancartas, con consignas alegóricas a la efeméride que enaltecen nuestros más intrínsecos valores y principios.
Los Huracanes de Mayabeque prestigian la magna cita del proletariado mundial, equipo aguerrido que contra todos los pronósticos, ha sabido llegar y mantenerse entre los primeros lugares de la Serie Nacional de Beisbol; acompañados en esta ocasión por la escuadra de Los Vegueros de Pinar del Río.
Patinaje, Pesas, Voleibol, Baloncesto son algunas de las modalidades deportivas que hoy participan de esta fiesta, en representación del resto de los trabajadores del sector en la provincia.
Avanzan por la calle 40 de San José de las Lajas con sus uniformes e implementos deportivos, de la mano de sus entrenadores, conjugando juventud y experiencia, en un derroche de colores y alegría.
