La Habana, 27 nov (Prensa Latina) Los cubanos conmemoran hoy el aniversario 153 del fusilamiento de ocho estudiantes de Medicina, considerado uno de los crímenes más atroces cometidos en la isla por el colonialismo español.
Como es tradicional, centenares de estudiantes realizarán esta jornada una peregrinación desde la escalinata de la Universidad de La Habana hasta su monumento que rememora el vil asesinato, en Prado y Malecón, en La Habana Vieja.
El 24 de noviembre de 1871, alumnos del primer curso de Medicina esperaban en el Anfiteatro Anatómico la llegada de su profesor Pablo Valencia, quien debía impartir una clase, pero al enterarse que demoraría, varios de ellos se dispusieron a asistir a las prácticas de disección del doctor Domingo Fernández Cubas.
Según apuntes históricos, algunos entraron en el cementerio, ubicado cerca de la escuela, y recorrieron sus patios, pues la entrada no estaba prohibida, y uno de ellos, Alonso Álvarez de la Campa, tomó una flor que estaba delante de las oficinas del cementerio, lo cual provocó la ira del celador, nombrado Vicente Cobas.
Cobas los acusó de rayar el cristal que cubría el nicho donde reposaban los restos del periodista español Gonzalo Castañón, director de La Voz de Cuba, vocero del cuerpo de voluntarios, que había sido ultimado por un patriota cubano en Cayo Hueso.
Los estudiantes fueron apresados y procesados en un juicio sumarísimo, pero el fallo no fue aceptado, y se realizó un segundo, y se determinó condenar a los jóvenes a la pena máxima.
Otros tres fueron escogidos al azar para llevar a cabo el escarmiento.
Los ocho estudiantes condenados a morir fueron conducidos con las manos esposadas y un crucifijo entre ellas hasta la explanada de la Punta, donde se llevó a cabo la ejecución.