A diario irrumpen en nuestros hogares, llegan sin pedir permiso y traen consigo el saludo, la invitación constante al conocimiento, al disfrute de la música, el oportuno consejo o la sugerencia que puede hacernos la vida más fácil.
A diario irrumpen en nuestros hogares, llegan sin pedir permiso y traen consigo el saludo, la invitación constante al conocimiento, al disfrute de la música, el oportuno consejo o la sugerencia que puede hacernos la vida más fácil.