La historia abriga el discurso pronunciado por el comandante en jefe Fidel en la despedida de duelo a los 24 héroes caídos en desigual combate frente las tropasyanki en Granada.
Los gobiernos de Cuba y la pequeña isla habían desarrollado relaciones entrañables durante el gobierno de Maurice Bishop y producto de ello Cuba tenía en aquella nación un grupo de colaboradores, entre los que contaban, médicos, constructores, asesores militares,traductores y personal de servicios.
Nadie podía sospechar que la calma seria interrumpida de súbito y mucho menos imaginar que la tragedia se apoderara de la pequeña nación en una secuencia de hechos maquinados por el imperialismo norteamericano.
Según expresara Fidel en su discurso de aquel 14 de noviembre, el 12 de octubre Bishop es destituido por el Comité Central; el 13 es arrestado en su domicilio; el 19 el pueblo se subleva y libera a Bishop y ese mismo día, el grupo de Coard ordena al ejército disparar contra el pueblo y como resultado son asesinados el presidente Bishop y otros valiosos dirigentes revolucionarios.
Los imperialistas yankis, apenas se manifestaron las contradicciones internas que salieron a la luz el 12 de octubre, decidieron la agresión.
El 25, se produce la invasión de tropas norteamericanas violando todas las normas del derecho internacional, bajo el pretexto de una cadena de mentiras desenmascaradas por Fidel en aquel acto.
La invasión de Granada se produjo en forma sorpresiva y traicionera, sin ningún tipo de aviso o advertencia previa, estilo Pearl Harbor, estilo nazi, enfatizó aquel día el Comandante en jefe Fidel Castro Ruz.
