En el acto de graduación primó el reconocimiento a las educadoras por el amor y la dedicación que profesan a los pequeños, además de su contribución con la formación educacional en los primeros años de vida.
El baile, la danza y la poesía se hicieron eco de esta fiesta en las que padres, educadoras y los pequeñines tuvieron un espacio animado además con las habituales travesuras de la payasa Pelusa y juegos de participación donde los infantes expusieron sus conocimientos a la par de disfrutar del espectáculo.
En el encuentro un vals, danzado por los egresados de esta enseñanza preescolar sirvió de colofón para la despedida con una coreografía en la que se mezcló la gracia de la infancia con acompasados pasos y vueltas característicos de este baile.
Estos 30 pequeñines se incorporaran a la enseñanza primaria junto a otros provenientes también de círculos infantiles y de las vías no formales en la educación prescolar (Programa Educa a tu hijo).